Puntos clave:
- La primera infancia es una etapa crucial para construir las bases de las capacidades básicas.
- Los bebés aprenden a través de la interacción y la práctica, siendo la imitación una herramienta clave para el aprendizaje.
- Los juegos de imitación y el modelado de conductas pueden ayudar a mejorar el desarrollo cognitivo, social y de autoconciencia de un niño, así como también a desarrollar sus creencias sobre cómo funciona el mundo.
- Los juegos de imitación simples pueden comenzar a una edad temprana y los padres pueden aprovechar el modelado de comportamientos tanto positivos como negativos para ayudar a sus hijos a desarrollar empatía y conciencia de sí mismos.
Se ha demostrado que la infancia temprana es una de las etapas más importantes en la vida de las personas. Según el Centro del Desarrollo Infantil de la Universidad de Harvard, las bases de cada una de nuestra habilidades clave se desarrollan durante este periodo. Desde el nacimiento hasta los tres años, el cerebro de un niño pasa por un proceso increíble en el que produce más de un millón de conexiones neuronales por segundo, ayudando al desarrollo de habilidades en esta etapa.
¿Cómo aprenden los bebés durante sus primeros años? A través de las interacciones y la práctica. Desde el día uno, creamos un ambiente de aprendizaje para nuestros hijos y contribuimos a su conceptualización del mundo.
Una de las formas en que aprenden los pequeños es a través de la imitación. En un estudio reciente, un grupo de científicos estudió la imitación en niños de 36 meses que observan a un adulto clasificar objetos diferentes en categorías. Los niños que tuvieron la oportunidad de observar imitaron el método utilizado por los adultos. En contraste, el segundo grupo que no había visto a los adultos tuvo más dificultades para realizar la misma tarea. También sorprendió ver que los mismos niños, al ser expuestos a objetos diferentes, eran capaces de clasificarlos de nuevo. No solo imitaron de forma directa, sino que fueron capaces de replicar la acción en un contexto diferente. Este es un ejemplo de cómo los pequeños aprenden de la interacción y de la repetición.
La imitación es una herramienta a la que los niños recurren naturalmente. ¿Cómo podemos potenciar sus beneficios en nuestros hijos? A esta edad podemos comenzar jugando juegos sencillos de imitación en los que se copian expresiones faciales y gestos como reír, aplaudir o mandar un beso.
Durante los “terribles dos años”, tu hijo imitará las cosas de forma tan específica que seguro te hará reír. Antes de lo que parece, se estará comunicando igual que tú. Incluso tal vez lo oigas repetir frases que te escuchó decir en algún momento. Esto no solo estimulará sus habilidades cognitivas, sino también sus habilidades sociales y de interacción con otros.
Cuando notes que tu hijo comienza a imitarte, puedes repite tus movimientos y reacciones para que él las observe atentamente. Incluso pueden jugar “al juego de la sombra” en donde él te siga e imite cada uno de tus movimientos. Diviértanse y anímalo a explorar cuando repita los movimientos por sí mismo. Este juego también estimulará su desarrollo lingüístico al describir lo que hace o al pedirle que repita las palabras que nombran las acciones que está imitando.
También puedes modelar varias conductas que quieras que tu pequeño aprenda o aprovechar esos momentos en que accidentalmente participas en alguna conducta incorrecta. Comienza por explicarle las consecuencias que tiene actuar de esa manera y menciónale que todos nos equivocarnos. Esta será una excelente oportunidad para modelar cómo decir “Lo siento” y crear una cultura de empatía con otros.
La herramienta de la imitación se puede usar de muchas maneras y tiene un efecto directo en el desarrollo de las habilidades sociales de tu hijo, de su aprendizaje sobre cómo reaccionar ante cada situación, del desarrollo de su autoconocimiento y de su planeación y flexibilidad cognitiva. Incluso a esta corta edad, le ayudarás a establecer sus propias creencias sobre cómo funciona el mundo. ¡Atrévete a jugar un juego de imitación con tu hijo! No te arrepentirás.
Si quieres consejos sobre cómo modelar conductas, visita: Espejito, espejito: El deseo de tu hijo de querer ser como tú
Y lee más sobre el tema en esta página en inglés:
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