¡Dale un impulso auditivo a tu bebé con los sonidos del mundo exterior! A partir del cuarto mes de gestación, tu bebé puede escuchar tanto sonidos intrauterinos (los latidos de tu corazón), como sonidos externos, (voces y ruidos que vienen del exterior de tu vientre). Estos sonidos deben atravesar la pared abdominal, y a veces también la columna vertebral, para llegar hasta tu bebé. ¿No te parece increíble?
Es importante tener en cuenta que el líquido amniótico reduce los sonidos externos, por lo que hablarle a tu bebé en tono bajo no es la forma más adecuada de estimulación. Pero no te preocupes, ¡hay muchas otras maneras de llevar a cabo la técnica auditiva y beneficiar a tu bebé tanto física como cognitivamente!
Al implementar correctamente la técnica auditiva, puedes promover la alerta de tu bebé. Estudios han demostrado que cuando los bebés escuchan la voz de su madre, su movimiento y frecuencia cardíaca aumentan. Además, se ha demostrado que el uso de sonidos específicos puede calmar al bebé y reducir su frecuencia cardíaca después del nacimiento.
¿Quieres saber qué ejercicios se recomiendan para estimular la audición de tu bebé? Aquí te van algunas ideas:
- Háblale a tu bebé en voz alta, clara y pausada.
- Cuenta un cuento o pide a tu pareja que lo haga.
- Escucha música clásica o grabaciones de sonidos de la naturaleza.
- Cántale una canción sencilla con voz clara y pausada.
Recuerda que siempre debes adaptar los ejercicios a las preferencias y reacciones de tu bebé. ¡Disfruta de estos momentos de conexión auditiva y estimula su desarrollo de manera divertida y afectuosa!
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