Hola de nuevo – la semana pasada escribí sobre la importancia de los primeros años, lo que nosotros en Kinedu entendemos que son momentos críticos y sub-atendidos por muchos. Damos por hecho esos preciados momentos donde el cerebro es mucho más sensible al aprendizaje. Hoy, tenemos increíbles herramientas que nos ayudan a navegar el desarrollo de nuestros bebés. Además, la tecnología está avanzando a pasos nunca antes vistos. Es el momento adecuado de aprovechar la convergencia de tecnología y la ciencia de la primera infancia para mejorar el desarrollo de millones de niños en todo el mundo.
La economía deflacionaria, tecnología, y el futuro
En Kinedu creemos que podemos impactar cómo los padres de familia interactúan con sus bebés en todo el mundo. El tiempo es ahora – por un lado, sabemos suficiente de la primera infancia para entender la magnitud de su importancia; por el otro lado, la tecnología ha avanzado tanto que podemos llegarle a todo el mundo con una voz y a través de canales que garantizarán un alcance amplio y profundo – en todas las regiones, no solo el mundo desarrollado. Piensen en mi país, México – 30% de todos los mexicanos tienen teléfonos “inteligentes” con acceso de banda ancha. La penetración de internet de altas velocidades no es algo sólo de las elites – algunos lo quieren declarar ¡un derecho universal!
Mark Suster, un inversionista de capital emprendedor y bloguero frecuente, habla del impacto deflacionario de la tecnología como su tesis de inversión. Como nunca antes, nuestro acceso a tecnología – que se abarata cada día y se inmiscuye más en nuestra vida diaria – ayuda a la sociedad a lograr cosas como (y lo cito):
- “conectar gente a gran escala y con información nunca antes vista
- transparencia y acceso a la información sin precedentes
- individuos conectados socialmente y plataformas que permiten el lanzamiento acelerado de productos exitosos
- Métodos de pago para consumidores (amazon, itunes, paypal) y negocios (adwords, square)”
Nosotros creemos en la tésis de Mark Suster. El menciona que algunas compañías han logrado crear valor aprovechando este “megatrend” como Amazon, Skype, Linkedin – todas compañías en nuestros radares.
Pero les invito a pensar en un sector que no ha alcanzado estas innovaciones increíbles. Si, se que hay muchos, pero quiero que piensen en la educación. La mayoría de las innovaciones trabajando en la intersección de educación y tecnología no han podido tomar ventaja de la tendencia macro de la economía deflacionaria. Yo creo que la razón es muy sencilla – están pensando “dentro de la caja” de la educación. ¡Necesitamos innovaciones fuera de la caja!
No quiero decir que estas compañías no están produciendo grandes e innovadores productos. Knewton, por ejemplo, está construyendo una plataforma que permite a los estudiantes personalizar su trabajo de curso, asegurando que todos aprendan a su ritmo. La construcción de dichos algoritmos es algo increíblemente complejo. Blackboard ayuda a instituciones educativas a elevar la experiencia de aprendizaje con herramientas de creación de contenido y conectividad. SchoolControl permite a los padres, hijos, y maestros, estar conectados en una misma plataforma.
Pero estas compañías no están reduciendo dramáticamente el costo para el consumidor; están apalancándose en tecnología para mejorar las herramientas de las escuelas. Mejorar la caja de herramientas es algo completamente necesario . pero no es innovación dramática ni disruptiva como lo fue Amazon en su momento, Uber, o AirbNb. Aunque si hay un ejemplo de una innovación disruptiva en educación – Khan Academy. Salman Kahn logró llevar conocimiento a millones de niños en todo el mundo, y fue pionero de un modelo de enseñanza aprovechando las bondades tecnológicas. No solo mejoró nuestra caja de herramientas, encontró una mejor manera, y redujo dramáticamente los costos, de enseñar a una gran parte de la humanidad.
Estoy convencido que es el momento para este tipo de innovación en educación inicial. Pero esta innovación dramática no vendrá de la mano del gobierno o de instituciones privadas de educación inicial. No vendrá mejorando las herramientas tradicionales con tecnología. Esta innovación solo vendrá al empoderar a miles de personas en todo el mundo a ser sus propios maestros (como lo hizo Kahn) – aprovechando las bondades tecnológicas en contenido y distribución para llegar a una gran masa poblacional. La innovación disruptiva sólo llegará cuando dejemos de pensar en empoderar escuelas y mejorar herramientas y empezemos a pensar en empoderar individuos y mejorar comportamientos. Necesitamos entender que la mayoría de los niños menores a cuatro años no están en instituciones educativas. De acuerdo a la OECD, 70% de los niños menores a 3 no están en centros certificados de primera infancia. Por definición – ¡atender a instituciones educativas, e ignorar a los padres y madres de familia, nunca será innovación disruptiva!
Nosotros queremos convertir a cada padre y madre de familia en el promotor ideal del desarrollo de su bebé. Si leíste la primera parte, ahora entiendes lo esencial y crítico que son las interacciones en los primeros años para formar una arquitectura cerebral sana. Es durante estos años que los niños construyen la base sobre la cual todo el aprendizaje y habilidades de inteligencia emocional se construye.
Aprovechando las bondades tecnológicas, podemos mover a padres de familia a un rol activo en el crecimiento de su bebé. Podemos lograr que madres cambien su rutina, y hablen, lean, canten, y bailen con sus bebés. Podemos hacer que trabajen en interacciones “servir-devolver” para que sean más enriquecedoras. Podemos darles ideas que ayudan a estimular el desarrollo de sus bebés en todas las áreas de desarrollo, ayudándoles a cruzar los hitos de desarrollo a tiempo. Podemos y queremos que pasen al menos 20 o 30 minutos de calidad con sus bebes.
Precisamente es esto lo que queremos lograr. Queremos poder digerir todos los conocimientos más avanzados en torno a la primera infancia y llevarlos a todos los padres de familia. Queremos ayudar a cada padre de familia a incrementar la cantidad, y más importantemente, la calidad, de las interacciones con sus bebés, impulsando el desarrollo cerebral. Queremos hacer esto desarrollando el mejor contenido multimedia – videos, blogs, tweets – para efectivamente comunicarnos con una nueva generación de papás. Queremos construir las mejores herramientas que aprovechan de las mega tendencias tecnológicas para ser tan eficientes y efectivos como se pueda. Creemos que este es el tipo de innovación dramáticamente disruptiva que incrementa el acceso a contenido de la primera infancia para millones de personas. Creemos que Kinedu es innovador y sabemos que tendrá un impacto tremendo en el futuro de millones de niños en el mundo.
Me encantaría escuchar sus comentarios en luis @ kinedu.com