Cuando nace un bebé, ¡todo cambia por completo! La rutina y la vida de la pareja dan un giro de 180 grados porque este nuevo ser depende totalmente de lo que los padres hagan o dejen de hacer. Cuidar a un bebé involucra de todo, desde cambiar pañales todo el tiempo, hasta dedicar tiempo para reír, hablar y jugar con ellos. ¡Incluso hay que estar atentos cuando duermen, comen y dan sus primeros pasos! Como puedes ver, el bebé demanda atención todo el tiempo, especialmente en sus primeros años de vida.
Es normal que surjan nuevas discusiones entre la pareja de vez en cuando. Antes, no tenían esta responsabilidad compartida, y ahora uno de ustedes tiene que actuar cada vez que el bebé necesita algo. Entonces, podrías preguntarte: ¿Quién debería levantarse por las noches? ¿Quién debería cambiar los pañales más a menudo? Para responder a estas preguntas, es importante tener en cuenta la situación de cada pareja. No se trata de iniciar una discusión sobre quién ha estado cuidando más del bebé últimamente.
No se puede llevar un marcador de cuántas veces tu pareja ha cambiado pañales en comparación contigo. Estamos hablando de una pareja que trabaja junta como un equipo para cuidar y criar a este nuevo pequeño ser. Es por eso que ambos deben contribuir, sin llevar la cuenta, sin pelear y sin culparse mutuamente. Lo que más les puede beneficiar a ambos es hablar de todo esto antes de que nazca el bebé. Entenderse mutuamente, ponerse en el lugar del otro y estar dispuestos a ceder de vez en cuando son las mejores formas de compartir esta nueva responsabilidad.
Recuerda, tener un bebé es una gran responsabilidad, pero también una enorme bendición. ¡Sin duda, puede ser una de las mejores cosas que te ocurran en la vida!
