¿Por qué retenemos líquidos durante el embarazo y cómo podemos prevenirlo?
Hablemos de esa hinchazón que te hace sentir tan incómoda en el tercer trimestre. Resulta que llevar una carga extra de líquidos en tu cuerpo es una de las razones principales. Pero, ¿por qué tanta retención? Pues bien, tu útero en constante crecimiento está poniendo presión sobre tus vasos sanguíneos. Esos vasos son como las autopistas que llevan la sangre desde tu corazón hasta tus piernas, pero con el crecimiento del útero, el tráfico se pone más lento y tu cuerpo se ve tentado a guardar más líquidos. También tiene que ver con los cambios hormonales que se están produciendo en tu cuerpo; éstos desencadenan alteraciones en la regulación de líquidos. Así que, además de tener ese vientre en crecimiento, también estás en una montaña rusa hormonal.
No te preocupes, esa hinchazón no debería ser motivo de alarma. Pero, si viene acompañada de dolores de cabeza intensos y persistentes, dificultad para respirar, presión arterial alta o una alteración en la visión, mareos o hasta desmayos, entonces podríamos estar hablando de una preeclampsia. No queremos espantarte, pero es mejor que contactes en seguida a tu médico si experimentas estos síntomas. ¡No te arriesgues!
Aquí te damos algunos consejos para aliviar la retención de líquidos:
- Ponte en movimiento: realiza actividades físicas de bajo impacto que involucren mover las piernas durante al menos 20 minutos.
- Dedica un tiempo a elevar las piernas, ¡solo 20 minutos dos veces al día! Puedes hacerlo mientras ves tu serie favorita.
- Evita el sol y el calor.
- No uses tacones altísimos ni calcetines ajustados.
- Asegúrate de comer alimentos ricos en potasio, ya que este mineral te ayudará con la retención.
- Controla tu ingesta de sodio y no te pases con la sal en tus comidas. No queremos que tu cuerpo retenga más líquido del necesario.
- No te olvides de cambiar de posición si llevas mucho tiempo parada o sentada. Es importante que evites estar en la misma postura durante mucho tiempo.
Recuerda que la retención de líquidos y la hinchazón son normales en el embarazo, pero no dudes en seguir estos consejos para mantenerlas bajo control. Si la hinchazón viene acompañada de los síntomas mencionados anteriormente, no esperes y consulta a tu médico sin demora. ¡La seguridad siempre es lo primero! Sigue disfrutando de este increíble viaje y recuerda que aquí estamos para ayudarte en cada paso del camino. ¡Tú puedes!
