Calidad supera cantidad. Antes y durante el embarazo, es crucial prestar atención a los alimentos que comes, para asegurarte de que le brindes a tu cuerpo y a tu bebé, nutrientes de buena calidad. ¡Estamos hablando de crear un ser humano dentro de ti! Los nutrientes que ingieres son como las piezas que construyen su sistema inmunológico y le dan las herramientas para su desarrollo a lo largo de su vida. ¡Así que ayúdale para que tu dieta sea su súper poder!
Contrariamente a los mitos, no necesitas hacer malabares con las calorías durante el embarazo. En el primer trimestre, la cantidad de comida no es la clave, sino más bien la calidad. Según los expertos del Departamento de Salud de Harvard, tu dieta debe estar llena de frutas y verduras, seguidas de cereales integrales y granos. Los lácteos, las proteínas y las grasas también están en el menú, pero con moderación, como en una dieta normal. Recuerda ajustar el consumo de grasas y azúcares, y busca obtenerlos de fuentes saludables como el aguacate y los frutos secos.
¡Pero no te preocupes, no necesitas contar cada caloría! A partir del segundo trimestre, solo necesitas agregar 300 calorías adicionales a tu día. Eso es como un vaso de leche, dos rebanadas de pan o un puñado de almendras extra. ¡Nada del otro mundo! Al llegar al tercer trimestre, tu apetito aumentará, porque tu pequeño estará en pleno crecimiento y tu cuerpo deberá equilibrar las necesidades de ambos.
Recuerda que la comida es un momento de disfrute y nutrición.