La maniobra de Heimlich en niños es una técnica utilizada para desbloquear las vías respiratorias superiores, es muy útil para lidiar con casos de obstrucción.
En general, muchos padres se familiarizan con este término por primera vez cuando su hijo comienza la alimentación complementaria. Aunque en realidad, es relevante desde que comienzan a tener mayor movilidad, ya que empiezan a alcanzar objetos por sí mismos; y la reacción más frecuente es explorarlos con la boca.
Muchos objetos y alimentos pueden tener el tamaño exacto para causar una obstrucción de vías respiratorias al ser deglutidos. Por lo tanto, es importante supervisar la exploración en todo momento.
La supervisión puede reducir significativamente el riesgo de ahogamiento; pero aún así puede suceder. Los bebés son cada vez más ágiles, y refinan sus movimientos; así que pueden tomar los objetos con mucha rapidez – esto hace que las obstrucciones sean comunes en niños de hasta cuatro años.
Por esta razón, es fundamental aprender técnicas de auxilio, como la maniobra de Heimlich en niños y bebés, que tiene como objetivo restaurar el flujo de oxígeno y reanimar al niño.
¿Quieres saber más sobre el tema? Sigue leyendo para entender mejor cómo funciona esta maniobra y cómo debe realizarse en bebés y niños.
¿Qué es la maniobra de Heimlich en niños y por qué es importante?
Es uno de los procedimientos más conocidos y recomendados para lidiar con situaciones de obstrucción de las vías respiratorias superiores en un entorno no hospitalario. Es incluso recomendada por la Academia Americana de Pediatría como uno de los entrenamientos básicos para padres.
El método fue introducido en la década de 1970 por el cirujano Henry Heimlich, en los Estados Unidos. Se puede aprender de profesionales de la salud; pero no necesita ser aplicada por uno. La idea es, precisamente, que cualquier persona que domine el proceso pueda prestar ayuda en caso de ahogamiento.
Cuando se tienen bebés cerca, aprender la maniobra de Heimlich se vuelve aún más importante. Aunque, se debe de tener cuidado de encontrar entrenamiento específico en la maniobra de Heimlich en niños y bebés, ya que antes de los 12 meses se usa una técnica diferente.
Vale la pena estar preparado para socorrer a tu bebé y evitar que algo más grave ocurra.
¿Cuáles son las señales que indican que se necesita la maniobra de Heimlich?
Muchos padres se preguntan si su hijo realmente está atragantándose o cuándo es el momento correcto de intervenir. Lo primero antes de intentarlo, es saber reconocer las señales de que tu bebé necesita ayuda.
- Bebé repentinamente sin reacción: un niño con atragantamiento no puede toser, llorar, hablar o respirar.
- Tos violenta: un bebé tosiendo es, a menudo, una buena señal; ya que muestra que las vías están parcialmente obstruidas y que el cuerpo está reaccionando para liberarse de lo que está atrapado. Sin embargo, si la tos persiste por mucho tiempo y se vuelve violenta, es una señal de que el niño tiene dificultades para liberar la entrada de aire y puede ser necesario intervenir.
- Sonido agudo o inusual mientras intenta respirar: al abrir la boca, el niño puede emitir un sonido agudo, extraño o incluso no emitir ningún sonido.
- Palidez o piel azulada: debido a la falta de oxígeno, el color de la piel puede cambiar.
¿Cómo se debe realizar la maniobra de Heimlich en ninõs?
La maniobra de Heimlich regular está indicada para socorrer a los niños mayores de 12 meses.
Para realizarla, abrázalos desde atrás y haz compresiones por debajo de las costillas, de abajo hacia arriba, hasta que veas que el objeto que causó la obstrucción sea expulsado por la boca.
Si en algún momento durante el procedimiento puedes ver el objeto que causó la obstrucción en la boca del niño, retíralo cuidadosamente. Sin embargo, no intentes hacerlo sin verlo, ya que al introducir el dedo en la boca del niño, puedes lastimarlo o empujar el objeto aún más profundo.
¿Cómo ayudar a bebés con menos de 1 año que se han atragantado?
Si su hijo tiene menos de 12 meses, puede seguir estos pasos:
- Sostenga a su bebé boca abajo apoyado en su antebrazo y colóquelo sobre sus muslos. Colóquelo ligeramente inclinado, de manera que su cabeza esté por debajo del resto de su cuerpo
- Sostenga la cabeza del niño con una mano. Toma el mentón para mantener la boca abierta, y así facilitar la entrada de aire y la salida del objeto obstruido.
- Con la otra mano, dé cinco golpes firmes con la mano abierta en la región central de la espalda, en el medio de las escápulas (huesos que promueven el movimiento de los hombros). Con este movimiento, a menudo, el objeto es expulsado. Si no sucede esto, haga el siguiente paso.
- Dé la vuelta al niño para colocarlo boca arriba, todavía apoyado en el antebrazo y el muslo, y ligeramente inclinado (cabeza por debajo del cuerpo). Coloqué dos dedos en el centro del pecho de su bebé, justo en el medio de los pezones. Haga cinco compresiones, empujando la región con firmeza, hasta que el objeto sea expulsado o el pequeño reaccione.
Continúe realizando ciclos de cinco golpes y cinco compresiones hasta que la obstrucción se resuelva o el niño responda.
En ambos casos (niños con menos o más de 12 meses), pida a alguien que llame al número de emergencias en su localidad o busque ayuda médica; mientras se realiza el procedimiento. Si el bebé continúa inconsciente, es posible que sea necesario realizar una reanimación cardiorrespiratoria.
Prevenir es mejor que lamentar.
¿Qué hacer para prevenir las obstrucciones respiratorias?
La maniobra de Heimlich en niños es una herramienta extremadamente útil, pero para no tener que pasar por una situación tan angustiante, es bueno prestar atención a algunas prácticas que pueden evitar las obstrucciones respiratorias. Aquí van algunas sugerencias:
- Evita que el bebé use juguetes que contengan piezas pequeñas. Si tienes hijos mayores que tengan este tipo de juguetes, supervisa siempre las actividades de juego.
- Al comenzar la introducción alimentaria, la comida de tu bebé debe ser ofrecida en trozos finos, con una textura suave o machacada. Aprovecha para descargar la aplicación Kinedu y ver clases informativas sobre la introducción alimentaria y otros temas relevantes para los padres.
- Alimentos en trozos pequeños, duros (como nueces, cacahuetes, castañas, etc.), o elementos como maíz, frijoles, palomitas de maíz y uvas enteras, pueden ser tragados directamente sin masticar y, por lo tanto, tienen un alto riesgo de ahogamiento.
- Monitorea a tu bebé mientras come. No permitas que coma acostado o reclinado, trata de alimentarlo siempre sentado en su periquera y evita ofrecer alimentos mientras está caminando o jugando.
- Asegúrate de mantener los objetos pequeños que comúnmente tenemos en casa fuera del alcance de tu bebé, por ejemplo: monedas, botones, baterías, tapas de bolígrafos, entre otros.
Aprender cómo hacer la maniobra de Heimlich en niños es fundamental, y ayuda a que te sientas preparado para ayudar a tus hijos en caso de emergencia. Así, pueden seguir explorando dentro de un ambiente seguro.
Es importante señalar que, incluso después de realizar el procedimiento y reanimar al bebé, se recomienda que los padres lleven a sus hijos al hospital para verificar que todo está bien.
¿Ya has tenido que hacer la maniobra de Heimlich? ¿Habías oído hablar de esta técnica antes? ¡Deja un comentario abajo y comparte tu experiencia!
