Puntos clave:
- Los bebés tienen un deseo innato de moverse y explorar su entorno antes de cumplir el año.
- Gatear es un hito importante del desarrollo que prepara a los bebés para caminar, pero hay otros hitos importantes que conducen a ello.
- Para ayudar a su bebé a empezar a gatear, necesita desarrollar suficiente control del cuello y la cabeza. Puede fomentar este desarrollo permitiéndoles pasar tiempo boca abajo, jugando con ellos en el suelo y utilizando objetos para entretenerlos.
- Cada bebé se desarrolla a su propio ritmo, así que no te preocupes si tu bebé no gatea de forma tradicional. Lo importante es que se muevan y exploren su entorno.
Los bebés tienen un deseo innato de explorar y moverse antes de cumplir su primer año. Por lo general, mueven los brazos y piernas ¡y vaya que se mueven mucho! A medida que tu bebé crece, es posible que estés ansiosa y emocionada por verlo caminar, pero antes de eso tiene que alcanzar otros hitos que le permitan hacer eso, por ejemplo, gatear.
Típicamente los bebés comienzan a gatear, luego se ponen de pie y después aprenden a caminar. Incluso si tu bebé aún es muy pequeño para comenzar a gatear, alcanzará distintos hitos de desarrollo que lo prepararán para gatear más adelante. Algunos de ellos son levantar la parte superior de su cuerpo cuando está acostado boca abajo y usar las piernas para tratar de empujarse, incluso si aún no puede moverse hacia adelante.
Pero, ¿qué necesita tu bebé para comenzar a explorar el mundo a través del gateo? Para dominar esta habilidad, tu pequeño primero debe desarrollar un buen control de cuello y cabeza. Para ayudarle, asegúrate de que pase suficiente tiempo boca abajo. Puedes jugar con él en el suelo mientras está sobre su estómago. Inténtalo en diferentes lugares, a distintas horas y con objetos llamativos para que se entretenga. También puedes incentivarlo a moverse colocando su juguete favorito frente a él. De esta manera, tu bebé intentará alcanzarlo y tomarlo. Otra manera de ayudarlo a comenzar a gatear es colocarlo sobre manos y rodillas y empujarlo suavemente por detrás para impulsarlo hacia delante.
Recuerda que cada bebé se desarrolla a su propio ritmo y que algunos bebés nunca gatean de manera tradicional. Lo más importante es que tu hijo pueda moverse para explorar y aprender de su entorno. Por lo tanto, no te preocupes si tu bebé aún no gatea o no llega a hacerlo. Esto no afectará su desarrollo posterior, siempre y cuando le brindes el ambiente y las oportunidades necesarias para seguir aprendiendo nuevas habilidades.