Hace mucho tiempo se creía que el estrés causaba abortos, pero la verdad es que hay muy poca evidencia que respalde esa teoría. El 10-20% de los embarazos pueden interrumpirse por abortos espontáneos durante el primer trimestre, pero eso no tiene que ver con el estrés.
Generalmente, los abortos espontáneos en el primer trimestre se deben a anormalidades genéticas o problemas en el desarrollo del embrión. Esas cosas pasan por razones naturales, como daños en los cromosomas del bebé o dificultades en la división celular. En resumen, los abortos ocurren por muchas causas, pero el estrés no es una de ellas. Ni el estrés moderado, ni el sexo, ni el ejercicio causan abortos.
Sabemos que es un miedo común durante el embarazo, pero recuerda que el estrés no es un factor de riesgo para los abortos espontáneos. Si aún tienes dudas o preocupaciones al respecto, contacta a tu doctor y hablen sobre el tema. Un experto podrá responder todas tus dudas y te ayudará a sentirte más tranquila.
Lo mejor que puedes hacer es cuidarte, comer saludable y evitar factores de riesgo como el alcohol y el tabaco. Habla con tu médico para conocer las señales y síntomas de un aborto y ten un sistema de apoyo sólido para controlar la ansiedad y sentirte segura.
Muchos abortos se deben a anomalías genéticas, por lo que no hay mucho que puedas hacer para prevenirlos. Pero lo importante es mantenerte saludable y cuidarte a ti misma antes y después de concebir. Así que relájate, disfruta del proceso y toma las precauciones necesarias para estar bien. ¡Todo saldrá bien!
