Puntos clave:
1. A los tres años, los niños tienen un vocabulario de 300 o más palabras y pueden adquirir de 4 a 6 palabras al día.
2. Habilidades lingüísticas avanzadas les permiten hacer más preguntas de «por qué», «qué» y «cómo».
3. Enseñar el uso correcto de pronombres como «yo» y «tú» es importante.
4. La lectura, el canto, las rimas y la conversación estimulan el desarrollo del lenguaje.
A los tres años los niños tienen un vocabulario activo de más de 300 palabras. De hecho, un niño promedio tiene la capacidad de aprender de cuatro a seis palabras nuevas cada día, siempre y cuando tenga acceso a palabras y experiencias nuevas diariamente. A esta edad las habilidades conversacionales florecen porque los pequeños ya son capaces de formas oraciones de tres o cuatro palabras e imitar los sonidos del habla.
Las nuevas habilidades verbales de tu hija le permitirán expresar sus pensamientos. Entre más avanzada esté, será más capaz de comunicarse y aprender. Estas nuevas habilidades lingüísticas traerán consigo una etapa de descubrimientos con toda una nueva gama de preguntas sobre el qué, el por qué y el cómo de las cosas. Por ejemplo, cuando no conozca una palabra te preguntará «¿qué es?» y al darle la respuesta tu hija ampliará su vocabulario.
Los niños de tres años aún están aprendiendo a usar los pronombres como «yo» y «tú». Aunque sean palabras fáciles de pronunciar, son conceptos difíciles de comprender y términos que cambian según quién esté hablando. Dale el ejemplo y usa correctamente estas palabras en tu habla cotidiana para que tu hija te imite. A esta edad, la dicción de tu pequeña será mucha más clara y hasta los desconocidos serán capaces de entender lo que dice. Antes solo tú sabías lo que te estaba diciendo.
Puedes estimular la capacidad verbal de tu hija cantando, recitando rimas o hablando de lo que están haciendo. ¡Leer también es una gran idea! Escoge libros con tramas sencillas y habla sobre la historia con tu pequeña. Cuando terminen de leer, ayúdale a contarte la historia y hablen de sus partes favoritas. Puedes fomentar su comprensión haciéndole preguntas sobre el cuento.