A los 13 meses, tu bebé ya es oficialmente un niño pequeño, ¡pero sigue siendo tu bebé! Después de cumplir un año, notarás que su desarrollo lingüístico avanza rápidamente. Puede que haya empezado a balbucear antes de cumplir un año, pero ahora sus intentos de comunicarse se vuelven más claros cada minuto.
Ritmos diferentes
Sí, el desarrollo del lenguaje recibe un gran impulso después del primer cumpleaños, a diferencia del primer año, donde probablemente notaste más cambios físicos y logros de hitos. Ahora comenzarás a entender las necesidades y deseos de tu bebé mejor que nunca.
Pero ten en cuenta que, al igual que el desarrollo físico puede variar mucho de un bebé de 10 meses a otro, lo mismo ocurre con el lenguaje a esta edad. Los niños pequeños aprenden a hablar en momentos, ritmos y maneras diferentes. Algunos (pocos) niños muy verbales ya están hablando en frases de dos palabras para cuando cumplen 14 meses, mientras que otros pueden hacerlo hasta los 24 meses. Algunos inician su desarrollo del lenguaje en los primeros meses después de cumplir un año, mientras que otros lo adquieren de manera lenta y constante. Entonces, ¿cómo saber si tu bebé va por buen camino? ¿Debería entender el lenguaje y disfrutar haciendo sonidos similares a hablar, recurriendo al gruñido y señalando para hacerse escuchar?
¿Qué esperar?
Entre los 13 y 15 meses, puedes esperar que tu pequeño responda a preguntas simples con gestos, cambios de comportamiento o incluso palabras. Por ejemplo, “¿quieres un plátano?” podría responderse con evidente emoción o un asentimiento de cabeza. También podrías notar que, cuando le das una instrucción simple de un solo paso, la seguirá. Un ejemplo es si sueles decirle a tu bebé “ponte de pie” cuando está en la bañera para enjabonarle la parte inferior del cuerpo; comenzará a levantarse tan pronto como lo digas. Otros ejemplos de órdenes simples comunes son “recógelo” o “dámelo”.
Tu niño pequeño comenzará a demostrar sus habilidades de comprensión del lenguaje señalando objetos familiares cuando menciones su nombre, como un perro, un gato, un bebé, un auto, una cuchara, una casa o un árbol. Puedes practicar esto en casa a través de la lectura y mirando libros o álbumes de fotos, y durante sus paseos al aire libre.
Es importante tomarse su tiempo, hacer pausas y disfrutar del momento. Esto te ayudará a estar presente y consciente, y quizás incluso comiences a sentir asombro y emoción por las cosas más pequeñas, como una mariposa cerca de las flores o una ardilla en un árbol. ¡Y para este momento, también podrán señalar a mamá y/o papá! Aquí es donde las fotos y los espejos se vuelven realmente divertidos. Puedes mirar álbumes de fotos y preguntar “¿dónde está mamá?”, “¿dónde está papá?”, y tal vez incluso probar con un familiar diferente, como un hermano, abuelo o incluso una mascota. Otra gran idea para trabajar el lenguaje mientras fortaleces tu vínculo es decir algunas afirmaciones frente al espejo.
Hacia los 15 meses, puedes notar que tu niño pequeño ya conoce el nombre de al menos 3 objetos y quizás incluso identifique a los animales por su sonido. Esto significa que puedes probar muchas formas divertidas de jugar que pongan en práctica estas nuevas habilidades, o al menos ponerlas en funcionamiento ya que sabes que pronto podrán lograrlas. Saca figuras de animales de juguete y muéstrales los sonidos mientras juegas con ellos o imita sus sonidos cuando los veas en un libro. ¡Mira este video de preguntas frecuentes para ayudar a tu pequeño a desarrollar sus habilidades lingüísticas!
Lista de hitos para 13-15 meses
- Responde a preguntas simples con gestos, cambios de comportamiento o palabras.
- Sigue instrucciones simples de un solo paso (como «Recoge el juguete»).
- Señala objetos familiares cuando mencionas su nombre.
- Señala a «Mamá» y/o «Papá».
- Conoce el nombre de al menos tres objetos.
- Identifica animales por su sonido.
Replantea el juego: Afirmaciones en el espejo
Preguntas Frecuentes: Vocabulario Básico y Primeras Palabras
Cuenta cuentos: El poder de pedir ayuda