Puntos clave:
- La pragmática, o las reglas de la comunicación social, son vitales para el uso efectivo del lenguaje. Enséñales la importancia de la comunicación no verbal y de comprender las expresiones faciales.
- Puedes enseñar a tu hijo habilidades como usar el lenguaje con diversos propósitos y seguir reglas de conversación, incluso si a veces las rompen.
A veces nos olvidamos de hablar sobre un componente muy importante del lenguaje: la pragmática o las reglas de uso del habla dependiendo de la situación y de los interlocutores. También conocida como comunicación social, la pragmática incluye las expresiones faciales, los gestos, lo que se dice y cuándo debe decirse. Saber y seguir estas reglas es esencial para la comunicación efectiva entre las personas.
Hay tres importantes habilidades de comunicación social que puedes enseñarle a tu pequeña:
- Diferentes usos del lenguaje. Informar, pedir o exigir implica una forma diferente de comunicarse.
- Adaptar el lenguaje al oyente y a la situación. Hay que hablar de forma diferente con un niño o con un adulto, omitir detalles cuando el interlocutor ya sabe de lo que se habla, o hablar de forma diferente dependiendo del lugar en el que nos encontremos.
- Seguir las reglas de conversación. Eso incluye respetar los turnos de habla, no cambiar de tema, saber qué tan cerca debes estar de alguien al hablar, etc.
Es normal y de esperarse que los niños rompan estas reglas mientras se familiarizan con ellas. Algunos pequeños no saben filtrar lo que dicen, así que, si quieres una opinión brutalmente honesta sobre cómo se te ve un vestido nuevo, ¡pregúntale a tu hija! Aunque a veces la falta de habilidades de comunicación social de los niños puede ser incómoda y embarazosa, recuerda que están aprendiendo. Simplemente date el tiempo de explicarle a tu pequeña que dijo algo inapropiado y qué es lo que debió haber hecho.
Por otra parte, si tu hija tiene problemas con sus habilidades conversacionales, asegúrate de que practique mucho. Antes de comenzar una conversación, di algo sobre el tema del que van a hablar para que ella sepa en lo que deberá enfocarse. Eso le ayudará a no cambiar de tema. Hazle preguntas durante la conversación para que pueda continuarla. También puedes explicarle qué es la comunicación no verbal y cómo, a veces, las expresiones faciales sirven para saber lo que las personas están tratando de decir. Miren imágenes de gente con diferentes expresiones y pídele a tu hija que identifique qué es lo que está sintiendo cada persona.