Seguro que has escuchado mil veces que el lazo entre una madre y su bebé es único. Esa relación especial existe y se hace más fuerte gracias a sus interacciones. ¿Y sabías qué ese vínculo puede «proteger» a tu hijo? Numerosos estudios lo confirman:
* Mejora la habilidad para establecer relaciones saludables.
* Reduce el riesgo de problemas académicos o de aprendizaje.
* Disminuye el riesgo de problemas de salud.
* Reduce la probabilidad de problemas mentales.
* Ayuda a evitar problemas de conducta.
* Reduce el riesgo de adicciones y abuso de sustancias.
Así que, te recomendamos fortalecer esa relación especial con tu bebé desde ya. Aunque enfrentes desafíos y preocupaciones en los próximos nueve meses, conectar con tu bebé es importante. Algunas mamás sienten esa conexión al instante, mientras que otras pueden tardar un poco más. Recuerda que tu bebé tiene una increíble habilidad emocional e intuitiva para sentir tu amor desde que está en tu panza.
En los próximos nueve meses, tú y tu bebé se moverán, crecerán y se adaptarán como si fueran una sola persona. Si tu bebé patea, tal vez acaricies tu panza instintivamente; y si se mueve, cambiarás de posición. ¡Están más conectados de lo que te imaginas! Tanto, que cuando finalmente tengas a tu bebé en brazos, sentirás como si estuvieras conociendo en persona a un viejo amigo.
Cada vez que te relajas para disfrutar de la presencia de tu bebé, creas un ambiente de seguridad y amor que tu bebé siente y lo hace sentir querido y apreciado. Fortalecer ese vínculo entre ustedes influirá en cómo tu bebé se relaciona con el mundo y desarrolla su personalidad.
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