Puntos Clave:
- Los conflictos entre niños pequeños son normales y vitales para el desarrollo socioemocional.
- Consejos para la gestión de conflictos: ser un modelo positivo de resolución, fomentar la cooperación, proponer compartir, reformular problemas, sugerir soluciones alternativas, fomentar la empatía y elogiar el comportamiento positivo.
Es perfectamente normal que, a veces, los niños pequeños se agobien y como padre serás testigo de que interactuar con sus compañeros o hacer amigos se vuelve un reto casi imposible de superar. No te preocupes, es muy común que surjan conflictos ocasionales entre los niños. Estos serán un componente necesario para el desarrollo socioemocional de tu hijo. Cuando surja un problema, aprovecha la oportunidad para enseñarle a tu pequeño estrategias para resolverlo.
La psicóloga Kelly Tu del Departamento de Desarrollo Humano y Estudios de la Familia de la Universidad de Auburn tiene algunos consejos de sobre cómo ayudar a tu hijo a resolver los conflictos con sus pares:
- Sé un ejemplo positivo de resolución de conflictos.
- Fomenta la cooperación. Sugiérele que hable en vez de usar la agresividad para resolver un problema.
- Proponle que comparta. Si la popularidad de un juguete se ha vuelto problemática entre los compañeros de juego de tu hijo, recuérdales que si comparten el juguete cada quién podrá usarlo durante la misma cantidad de tiempo. Puedes cronometrar los tiempos si es necesario.
- Reformula. Si tu hijo está llorando o lo invade una emoción muy fuerte, pídele que vuelva a explicarte el problema de un modo que esté abierto a soluciones. Por ejemplo, «No me da el crayón morado» puede reformularse como «Hay dos artistas, pero solo hay un crayón morado».
- Enséñale algunas alternativas. Si compartir es muy difícil para tu pequeño, sugiérele hacer otra cosa o jugar con un juguete diferente. Aceptar la situación y después proponer una solución es muy útil cuando se lidia con conflictos entre niños pequeños.
- Ayúdale a ver la situación desde el punto de vista de la otra persona. Esta estrategia es muy útil para evitar conductas agresivas y fomentar la empatía.
- Halágalo. Mostrarle apoyo y animarlo a usar resoluciones positivas refuerza dichas conductas. Muéstrale a tu hijo que aprecias que haya resuelto un conflicto, que eso se siente bien y que reconoces el esfuerzo que hizo.
- La práctica hace al maestro. Asegúrate de darle muchas oportunidades a tu hijo para pasar tiempo con otros niños y jugar con sus compañeros.