¿Sabías que los aceites esenciales son como la magia concentrada de las plantas? ¡Sí! Son como los «superpoderes» aromáticos que sacamos de la corteza, las flores, las hojas y más. ¡Son súper versátiles y han estado por ahí desde hace siglos!
Y seguro conoces a los famosos como la menta refrescante, el árbol del té, la lavanda, el eucalipto que despeja todo y el bálsamo de limón. Pero hay muchos más, cada uno con sus trucos especiales. Y si estás esperando un bebé, puedes elegir los aceites que son seguros para las futuras mamás. Los expertos de aromaterapia dicen que puedes usar con toda confianza aceites como la bergamota, pimienta negra, camomila, salvia, ciprés, incienso, geranio, jengibre, toronja, enebro, limón, naranja, rosa, sándalo, árbol del té y ylang ylang. ¡Vaya lista! Pero espera, hay una regla: ¡nunca los uses al natural, directo de la botella! Hay que diluirlos. La fórmula mágica es una gotita de aceite por cada cucharadita de aceite base, como la manteca de cacao, el aceite de oliva o el coco. ¡Así estarás segura y relajada! Y si te sientes como un torbellino de estrés, con jaquecas o ansiedad, estos aceites son una gran forma de ayudar a relajarte. Un masaje en las sienes con lavanda, camomila o geranio puede ser tan efectivo como algunos medicamentos. Aromatiza tu habitación antes de dormir y verás cómo tu mente y cuerpo se relajan de inmediato. Así que, ¿lista para añadir un toque mágico y aromático a tu vida? ¡Un poquito de estos aceites rinde un montón! |
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