Hablemos sobre vaginitis. En la vagina se encuentra un grupo especial de microorganismos que se encargan de mantener el equilibrio perfecto de acidez y protegernos de otros bichos indeseables. Pero, si algo altera esa armonía, pueden reproducirse más de la cuenta o colarse otros gérmenes, provocando una infección vaginal.
¿Qué cosas pueden provocar la vaginitis? Aquí van algunas posibles causas:
- Irritación por usar productos de limpieza perfumados, duchas vaginales, preservativos, desodorantes o jabones íntimos.
- Alergia a la ropa interior sintética. Tu cuerpo prefiere respirar con ropa de algodón.
- Cambios hormonales y bajos niveles de estrógeno. A veces pueden causar irritación e infección.
- Infecciones de transmisión sexual como la clamidia o el herpes. ¡Cuidado ahí! La protección siempre es una buena idea.
- La tricomoniasis, una infección provocada por unos microorganismos que se pasean durante el acto sexual.
¿Cómo puedes prevenir la vaginitis?
- Limpia siempre de adelante hacia atrás con papel higiénico. ¡Evita contaminaciones!
- Mantén una buena hidratación y orina antes y después de tener relaciones sexuales. Es como una limpieza para tu zona íntima.
- Usa ropa interior de algodón.
- No te dejes puesto el traje de baño mojado por mucho tiempo.
- Evita la ropa ajustada, especialmente si es sintética.
- ¡No olvides utilizar preservativo! Además de prevenir embarazos no deseados, también reduce el riesgo de enfermedades sexuales. ¡Protección total!
Y si sientes irritación, dolor, hinchazón o notas cambios extraños en el flujo vaginal, acude a tu médico de confianza inmediatamente. Es importante obtener un diagnóstico preciso y un tratamiento adecuado. ¡Nada de autodiagnósticos, eso puede complicar las cosas!