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¿Qué enfermedades de transmisión sexual podrían afectarme durante el embarazo?

Las enfermedades de transmisión sexual (ETS) son infecciones causadas por virus o bacterias que se pueden transmitir a través de actividad sexual anal, oral o genital con una persona infectada. Algunas enfermedades, como la Hepatitis B, también se pueden transmitir a través del contacto con sangre infectada mediante agujas, cuchillas u otros objetos afilados. Tomar precauciones para prevenir las ETS durante el embarazo es crucial, ya que ciertas infecciones pueden pasar a través de la placenta y potencialmente dañar a tu bebé. Las ETS son peligrosas y pueden provocar complicaciones como parto prematuro, aborto espontáneo o infecciones del tracto urinario.

Aquí tienes algunas de las ETS más comunes de las que debes estar al tanto:

• Clamidia
• Hepatitis B
• Herpes
• Sífilis
• Gonorrea
• VPH (Virus del Papiloma Humano)
• VIH/SIDA

Es importante tener en cuenta que algunas ETS pueden no presentar síntomas, por lo que es esencial consultar a tu médico de inmediato si sospechas una posible infección. Entonces, ¿cómo puedes protegerte de las ETS durante el embarazo? Si bien puede ser difícil eliminar por completo el riesgo, hay medidas que puedes tomar para minimizarlo. El uso constante y correcto de preservativos durante la actividad sexual puede ayudar a reducir la probabilidad de transmisión. Sin embargo, es importante tener en cuenta que los preservativos pueden no proporcionar una protección completa contra todas las ETS. La forma más efectiva de reducir el riesgo de contraer ETS es mantener una relación sexual monógama con una pareja que también esté libre de ETS. Esto garantiza un menor riesgo de exposición.

Recuerda que la comunicación abierta con tu pareja y los controles regulares con tu proveedor de atención médica son cruciales para mantener la salud sexual durante el embarazo. Ellos pueden brindarte orientación, realizar pruebas necesarias y ofrecer tratamientos apropiados si es necesario. Tomando medidas proactivas, puedes ayudar a protegerte a ti misma y a tu bebé de los posibles riesgos asociados con las ETS.

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